El puente que nunca se hizo

La inmigración urbana y la necesidad de trabajar para comer, creó a finales del siglo XIX el Puente San Luisito a la altura de la calle Juárez del centro de Monterrey. Este puente fue destruido en varias ocasiones.

El 1 de enero de 1980, Monterrey estrenaba un nuevo alcalde, Pedro F. Quintanilla Cóffin. A los pocos días siendo alcalde, el 12 de febrero de 1980, Don Pedro F. Quintanilla presentó al cabildo un proyecto que era una idea promovida por el gobernador Eduardo Livas al final de los sesentas, la idea era construir un puente tanto peatonal como comercial sobre el Río Santa Catarina. Este proyecto estaría conectando el centro de Monterrey con el Mercado Díaz Ordaz (que actualmente sí existe y está en el extremo de la colonia Independencia).

Había 4 ideas diferentes, de los cuales 2 eran tener el puente a nivel de la avenida Constitución. Los otros 2 proyectos, era el puente elevado sobre la avenida Constitución. La imagen siguiente es uno de esos proyectos y tenía salas de cine en los extremos y un auditorio al centro:

Puente sobre el Río Santa Catarina.

El proyecto trataría de resolver el problema del comercio en pequeño y fue presentado a grupos de comerciantes y tuvo una buena aceptación. Los líderes de la CTM y de la CROC también estaban conformes con el futuro puente. El costo total sería entre 80 y 100 millones de pesos.

El 18 de febrero de 1980 se le informó a la prensa que el puente tendría 650 locales y otros 400 locales en el Mercado Díaz Ordaz, que hoy está en la colonia Independencia. Todos estaban de acuerdo con la construcción del puente, lamentablemente, el gobernador Alfonso Martínez Domínguez estaba ocupado en proyectos grandes, como la construcción de la Gran Plaza y nunca apoyó la construcción del puente.

El alcalde que tuvo Monterrey después de Don Pedro F. Quintanilla, el ing. Oscar Herrera Hosking, también intentó resolver el problema de los comerciantes ambulantes y cerró las calles de Colegio Civil y Reforma para que fuera una zona peatonal y comercial, el tema lo conocemos, no fue la mejor solución y hoy esas calles ya fueron liberadas de comerciantes.

En mi opinión, era buena la idea del puente con locales comerciales sobre el Río Santa Catarina, es más, pienso que se debería retomar esa idea y mejorarla. Hasta pienso que un puente similar podría unir Fundidora con el Parque España y hasta un gran estacionamiento podría tener y todo sobre el Río Santa Catarina.

Fuente:
Libro "Mi Ciudad, su Mística y su Alcalde" de Pedro F. Quintanilla, Ed. Castillo, p.263.